Es parte de la política de control y prevención del tránsito que impulsa el gobierno porteño
Los primeros sondeos demostraron muchas imprudencias de los transeúntes. Mayor atención: si usted es peatón o ciclista, no respeta las normas, cruza de manera inadecuada las calles de esta capital o desatiende las señalizaciones de los semáforos, podrá ser multado por la Guardia Urbana. El programa, en principio, se lanzará a fines de este mes, pues estos lineamientos forman parte de la política de prevención y control que el gobierno porteño lleva adelante: los guardianes labrarían multas didácticas a los peatones y a los ciclistas que cometan imprudencias en la vía pública. Esta nueva función de la Guardia Urbana se sumará a su tarea de sancionar infracciones a los automovilistas que no cumplan con las normas de tránsito, de acuerdo con la planificación la Secretaría de Seguridad Urbana de la ciudad.
Ahora bien: ¿en qué consiste la multa didáctica? A los peatones que cometan imprudencias, desde esperar sobre la calle para cruzar en una esquina, no respetar los semáforos, o hacerlo a mitad de la cuadra, se les entregará un formulario con la infracción, en el que se detallará, además de los datos personales, en qué error ha incurrido el peatón, a modo de advertencia educativa, aunque no punible.
Los ciclistas también están involucrados en esta cuestión: deberán respetar los semáforos, no podrán circular en dirección contraria ni tampoco hacerlo sobre las veredas, entre otras faltas muy frecuentes en la ciudad.
"De acuerdo con el sondeo que hemos realizado, hay muchas imprudencias de los peatones y de los ciclistas en la ciudad. Y no sólo queremos que tomen conciencia de sus faltas, sino también que se lleven algo más que una advertencia: un papel donde se detalle la infracción que cometieron para que tomen conciencia. Por eso, los formularios tendrán un atractivo especial, para que no los tiren y se lo lleven a sus casas", dijo a LA NACION Claudio Suárez, subsecretario de Seguridad Urbana.
Multas para el archivo
La iniciativa que impulsa el gobierno porteño tiene como objetivo que los 400 guardias urbanos que actualmente están en actividad (se duplicarán a fin de año, según estiman los funcionarios de la ciudad) también se sumen al trabajo de los inspectores y de la policía para ampliar el abanico de controles, principalmente en el macrocentro, y también tener la facultad de labrar multas a los automovilistas.
Según pudo saber LA NACION, las multas didácticas contarán con formularios especiales y el gobierno retendrá una copia para llevar una estadística de las infracciones que se cometen en la calle.
"En este proceso que llevamos adelante desde hace poco más de una semana (el 22 del mes último) los guardias urbanos han concretado muchas advertencias. Lo cierto es que notamos que los peatones son los más imprudentes, por ello pensamos en una multa didáctica para que realmente puedan cambiar las malas costumbres. Los guardianes comenzarían a emitir las multas didácticas, al mismo tiempo que puedan labrar multas a los automovilistas. Será una actividad conjunta para ellos", dijo Suárez.
Sobre el perfil que adoptará esta nueva fuerza del gobierno, el funcionario agregó: "No queremos que la Guardia Urbana sea como los antiguos zorros grises, pero tampoco que no tengan la facultad de hacerse respetar. Por eso estamos buscando el equilibrio para que sean respetados por los transeúntes".