El mercado laboral español, uno de los más excluyentes de la UE para las madres
La tasa de empleo de las mujeres europeas se desploma cuando llegan los hijos, y el mercado laboral español es uno de los que pone más dificultades para conciliar la vida laboral con la familiar.
Las estadísticas vuelven a mostrar el largo camino que aún queda por recorrer para que los hombres y mujeres alcancen la paridad. Los datos apuntan a nuestro país como uno de los más rezagados del Viejo Continente.
Eurostat hizo público ayer un estudio que revela que la tasa de empleo de la población femenina se desploma en cuanto empiezan a nacer los hijos. Las cifras son de 2003, y se refieren a hombres y mujeres de entre 20 y 49 años. El 75,1 por ciento de las europeas sin vástagos menores de 12 años trabaja a tiempo completo, y sólo el 15,2 por ciento lo hace a tiempo parcial. Los porcentajes son sensiblemente diferentes para las mujeres con niñas y niños de menos de 12 años: el 60,4 por ciento sigue trabajando a tiempo completo, mientras que la actividad a tiempo parcial sube hasta el 22,7 por ciento.
La vida laboral de los padres no sufre un gran vuelco con la llegada de los pequeños al hogar, y la variación es inversa a la de las madres. De hecho, son menos los hombres sin hijos que trabajan a tiempo completo (85,7 por ciento) que los padres de familia (91,3 por ciento). Los trabajos a tiempo parcial son marginales tanto para padres (2,6 por ciento) como para quienes no tienen cargas familiares (2,6 por ciento).
Difícil compatibilización
Nuestro país figura en los últimos puestos en lo que se refiere a las madres que mantienen una actividad a tiempo completo y la compatibilizan con la educación de sus hijos menores de 12 años. Sólo el 51,2 por ciento de las españolas lo logra. Es una tasa inferior al 61,7 por ciento de mujeres que trabaja a tiempo completo y no tienen niños pequeños.
Sólo en tres países de la UE parece más difícil que en España mantenerse en plena actividad profesional y maternal. En Italia, sólo el 49,7 por ciento de las madres con hijos menores de doce años trabajan durante toda la jornada. Hungría se sitúa entre España e Italia, con el 50,3 por ciento, y Malta ocupa el último lugar con el 26,7 por ciento.
Por lo que se refiere a los varones españoles, el 90 por ciento realiza una jornada laboral completa cuando no tiene hijos pequeños; porcentaje que sube al 93 por ciento cuando de lo que se trata es de ganar para comprar pañales, por un lado, y de cambiarlos, por otro.
La tendencia de que la tasa de empleo femenina descienda con la llegada de los hijos se acentúa en función del número de los mismos. Si la tasa de empleo entre las europeas con una hija o hijo de menos de 12 años es del 64,8 por ciento, entre las madres de dos criaturas baja hasta el 57,8 por ciento; y hasta el 41,2 por ciento cuando llega el tercero. Curiosamente, la tasa de empleo de las madres españolas sólo supera a la media europea en este último caso. El 41,3 por ciento de las españolas con tres hijos de corta edad se mantiene en el mercado laboral, lo que supera en una décima el dato medio de los Veinticinco.
Diferencias más significativas
Las principales diferencias en términos de trabajo a jornada completa entre las mujeres con hijos y aquellas sin hijos (o con hijos mayores de 12 años) o, dicho de otra manera, el descenso de la actividad a tiempo completo al llegar la maternidad, se dan en la República Checa (85,7 por ciento frente a 54,1 por ciento), en Hungría (78,2 por ciento y 50,3 por ciento), Eslovaquia (81,4 por ciento y 59,1 por ciento), Estonia (83,8 por ciento y 62,4 por ciento), y Reino Unido (83,2 por ciento y 61,8 por ciento).
Por lo que se refiere a la contratación a media jornada o, en todo caso, por una duración inferior a la jornada completa, esta alternativa está más desarrollada en Holanda (54,7 por ciento), Reino Unido (36,2 por ciento) y Alemania (35,1 por ciento).
El ejemplo nórdico
Al pensar en conciliación entre vida profesional y familiar, y en igualdad de roles entre el hombre y la mujer en el hogar y en el trabajo, no hace falta bucear en las estadísticas para pensar inmediatamente en los países nórdicos. Los datos hechos públicos ayer por Eurostat confirman esta idea preconcebida en el caso de Dinamarca y Finlandia pero, al menos por la falta de cifras o por la escasa fiabilidad de las mismas, no aclaran la situación de Suecia. Entre los países que también se incorporan a este grupo aparecen Lituania, Portugal y Eslovenia.
Lo cierto es que en el caso de Eslovenia y Dinamarca, la tasa de empleo a jornada completa de las mujeres con hijos (85,3 por ciento y 79,9 por ciento respectivamente) es superior a la de las que no los tienen (83,1% y 77,1 por ciento) Los países que registran mayores tasas de empleo entre las madres son Eslovenia (85,3 por ciento), Dinamarca (79,9 por ciento), Lituania (79 por ciento) y Portugal (76 por ciento).
www.elmundo.es, 8 de agosto de 2005